Hacer visitas culturales con niños es posible. En la provincia de Sevilla hay muchos lugares que se pueden visitar en familia y en los que los niños disfrutarán. Y es que en los castillos y fortalezas medievales los niños se trasladarán a tiempos históricos. De una manera amena e imaginándose caballeros luchando por su fortaleza, conocen el origen a los que se remontan.
Superposición de culturas, que han dejado, como legado, un valioso patrimonio. Si comprender la realidad requiere en gran medida conocer la historia, la ”Ruta Castillos de Sevilla” de carácter cultural recorre aquellos castillos de la provincia de Sevilla, que, siglos atrás, fueron lugar de encuentro de culturas, centro de comercio y transmisión de conocimientos, así como enclave defensivo, y que hoy permanecen latentes aunque lejano en la memoria colectiva.
Un legado que ha sido en gran parte recuperado, y que hoy voy a resaltar, mediante este artículo. No obstante, encontrareis más información en la guía mencionada anteriormente.
Alguno de estos castillos son:
Situado en un alto sobre el río Guadaíra, de traza Almohade y con construcciones bajomedievales, comprende una serie de edificaciones entre las que destaca el Alcázar. El Castillo de Alcalá de Guadaíra está formado por once torres, con detalles arquitectónicos y decorativos de gran valor.
En la misma localidad aún se conservan otras dos fortificaciones, el Castillo de Marchenilla , formado por construcciones de varias épocas, en algunas de las cuales parecen haberse aprovechado partes y materiales de construcciones más antiguas y el Castillo de Gandul del que sólo queda una torre. Su aspecto es el resultante de una mezcla de distintas fases constructivas.
En el municipio de El Coronil existen dos castillos: el Castillo de El Coronil, que primero fue una pequeña fortaleza árabe y luego fue palacio cristiano, almazara, cuartel de la Guardia Civil y casa de vecinos; y el Castillo de Las Aguzaderas, a unos 3 kilómetros del casco urbano, de origen árabe y declarado Monumento Nacional en 1923.
Fuentes de Andalucía donde es interesante visitar el Castillo de la Monclava, donde se conservan restos de sílex y de cerámica ibérica. Se trata de una fortaleza que ha pasado por el poder de romanos, musulmanes y cristianos.
Un poco más moderno, del periodo musulmán, es el Castillo de Hierro que durante los siglos XV y XVI se transformó para convertirse en la residencia de los señores de Fuentes.
En la localidad de Mairena del Alcor, el llamado Castillo de Luna fue construido en dos fases aprovechando una primitiva atalaya musulmana. En una primera intervención a mediados del siglo XIV, fue levantado el patio de armas junto a las cuatro torres angulares que lo flanquean; siendo ya de bien entrado el siglo XV el foso y el perímetro exterior que abraza el núcleo central.
La historia de El castillo de Utrera se escribe con trazo sinuoso y es que a lo largo de su dilatada historia, fue objetivo de numerosos ataques al constituir una plaza de enorme importancia estratégica. Fue mandado construir en el siglo XIII por el Concejo de Sevilla, siendo destruida por las tropas de Muhammed V de Granada y, posteriormente, reedificado de nuevo.
Es una publicación práctica, en la que se describe más de 40 castillos y fortificaciones, su historia, su estado de conservación y sus condiciones de accesibilidad. Documento que sacia la curiosidad del visitante, y que, encuentra en él, además, referencias históricas a las costumbres, forma de vida y organización social de la época.